DEL DIA DEL TRABAJO Y
ALGO MAS
Hoy es primero de mayo, para muchas personas en el mundo es día
de asueto, de vacaciones y oportunidad de descanso familiar luego de su quehacer
cotidiano. Para otros muchos, especialmente los obreros es día de manifestaciones y reivindicaciones
laborales. En otros espacios, son manifestaciones en torno a inconformidades ante el poder
político establecido y o manifestaciones manipuladas en favor del poder establecido. En
un ambiente de tolerancia, todo es aceptado.
El tema es que es el día del TRABAJO, y se presta a reflexionar sobre esta actividad
humana que todos realizamos de uno u otro modo. El día del trabajo se
estableció a fines del siglo XIX en la ciudad de Chicago ante las
reivindicaciones obreras para que el horario de laboral fuera establecido en 8
horas trabajo, 8 horas de descanso y 8 horas para la familia. Al principio
incomprendidos, pero este movimiento llego a todos los países y fue establecido
este día en memoria a este movimiento y dedicado a todos los trabajadores.
Sin embargo, quien no trabaja, quien no lucha por ganarse el
pan para llevarlo a la familia, quien no trabaja para transformar y crear,
quien no trabaja para emprender. Todos de una u otra manera hacemos un quehacer
que sirve para aportar algo a la actividad creadora. El ideal es que logremos
la recompensa justa y éxito a ese trabajo. Es lo que buscamos con la lucha de
lograr un sistema económico justo. En concreto en nuestro país, anhelamos un
país justo para todos sus ciudadanos, que todos tengamos una oportunidad para
vivir dignamente y espacios suficientes para ejercer nuestra función laboral
justa y equitativa. Sin embargo estamos lejos de este sueño. Tan difícil lograrlo
porque desde la profundidad de la persona humana se deterioran los valores que
contribuyan a un mundo más justo.
Muchas veces esperamos que otros cambien las estructuras
injustas, ponemos nuestras esperanzas en los políticos y cada cuatro años
depositamos nuestra confianza en uno que otro caudillo político y luego de
darle nuestro voto, al terminar su periodo es la misma frustración la
diferencia es que ellos terminaron ricos. Y así es todo un círculo vicioso.
Ahora vemos la contaminación ambiental con la campaña electoral anticipada,
ilegal, inmoral y anti ecológica. Los políticos se venden y ofrecen soluciones,
al final lo mismo.
El trabajo, es una actividad, digna, noble, grande. Viene a
mi mente la imagen de mi padre y mi madre, dos personas dignas de imitar.
Amantes del trabajo que a su avanzada edad se ganan el pan de cada día, no le
piden nada a nadie, simplemente trabajan y trabajan.
Si asumimos nuestra actividad de trabajo con vocación, con
entrega y con mística, transformaríamos la vida. Veo al campesino que
transforma la tierra, la produce y nos ofrece su producto que llegara a
nuestras mesas. Veo a los obreros y patronos trabajando en afán de contribuir a
la producción. Veo a los burócratas con mística de trabajo, porque devengan un
salario fruto de los impuestos de la ciudadanía. Veo a los dirigentes del país
haciendo su trabajo con honradez, a los jueces, a los policías, los diputados,
etcétera y etcétera. Pero estamos lejos de eso, porque no amamos lo que
hacemos, está el vicio de la corrupción, de lo fácil, por eso tenemos el país
que tenemos. Cada cuatro años hay nuevos ricos, porque buscan el poder político
como una forma nueva de salir de la pobreza. Y así un sin números de
situaciones que denigran el TRABAJO.
El trabajo es parte de nuestro SER y nuestro aporte a la
capacidad creativa en el mundo. Así que hoy escribo estas notas como un
homenaje y me uno a la felicitación a TODOS LOS QUE TRABAJAN…
Escrito por: David López
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