Escribo esta nota con el afán de compartir experiencia vivida
en la lucha diaria de producir y trabajar el campo.
Desde hace años en la parte baja de mi pueblo, JACALTENANGO,
HUEHUETENANGO, se tienen proyectos de mini riego que aglutina a tres
asociaciones de pequeños parcelarios. La conducción del agua viene del Río
Azul. Las características de esta fuente es alcaloide, con mucho sarro y es un factor
dañino para las tierras a largo plazo.
Con todos los retos que significa la agricultura en la zona,
los vecinos de estos lugares han luchado por producir con esperanzas, corriendo
riesgos de lo que significa invertir y trabajar duro la madre tierra. En muchos
casos han sido víctimas de estafas de intermediarios. Con todo este esfuerzo,
se genera fuentes de trabajo para mucha gente de la zona. Yo me he adherido a la experiencia emprendiendo
algunos cultivos.
Por lo vivido y por las constantes reflexiones que hacemos con los lugareños constatamos una serie de situaciones
que es bueno considerar.
El campo provee alimentos. Si no fuera por los pequeños
agricultores que producen hortalizas, maíz, frijol, Jamaica, maní y otra serie
de productos, como frutales, etcétera, no se podrían abastecer los mercados
locales. Me atrevo a decir que la verdadera economía proviene de los que
trabajan y producen el campo.
En el caso particular, es una zona fronteriza. Es un mercado
abierto a los productos mexicanos, para el consumidor es bueno pero no para el
productor local. Hay una competencia desleal.
Los insumos agrícolas son elevados y para muchos agricultores
sus costos de producción son altos.
El mercado es y será siempre un gran reto.
Las organizaciones requieren de mucho apoyo en
fortalecimiento institucional.
Hay una gran ausencia de las instancias del estado,
particularmente las instancias que tienen que ver con la agricultura.
Se habla de
desarrollo, autogestión, de auto
abastecimiento, seguridad alimentaria. La parte baja de Jacaltenango tiene
cuatro caballerías, cuatro mil cuerdas de mini riego, un gran potencial para la
producción, pero sin el apoyo necesario, sin un financiamiento adecuado, sin
apoyo técnico y sin mercados de sus productos seguramente no tendrán futuro.
Un amigo me hablaba de la industrialización de los productos,
pero sin recursos económicos es difícil.
De igual modo quijotescamente, he pensado que se puede
producir alimentos y venderlos al Estado para proveer comida en las llamadas
Bolsas Seguras en vez de dar dinero a la gente.
Experiencias como esta habrán en otras partes del país, y de
igual modo no tendrán futuro si no se les da el apoyo adecuado. Hago un llamado
a las instancias gubernamentales. Basta de improvisación, y es necesario poner atención
donde hay que ponerlas. Tenemos recursos, tenemos gente trabajadora pero no tenemos el apoyo necesario.
De igual modo, los convenios, acuerdos, que se hagan con las organizaciones locales.
Los alcaldes o no tienen la visión y la experiencia o de otro modo sirve solo
para sus corruptelas y politizan todo para comprar votos a futuras elecciones.
Escrito por David López.
Abril 17 del 2,017.
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